
01 Oct DOMÍNGUEZ EN LM ARTE COLECCIÓN
Eliseo G. Izquierdo es Director Artístico del museo LM ARTE COLECCIÓN. Esta importante colección de arte canario e internacional se exhibe en las salas de una casona canaria del siglo XVIII situada en la denominada calle Obispo Rey Redondo de la que fuera ciudad natal de pintor Óscar Domínguez (Tenerife, 1906 – París, 1957), San Cristóbal de La Laguna. Popularmente conocida con el nombre de calle de La Carrera, se trata de una de las arterias principales de la ciudad, llamada así porque desde el siglo XVI se realizaban en ella carreras de sortijas o de cintas a caballo. La ubicación de LM Arte Colección, por tanto, resulta inmejorable, situada a pocos metros de la Catedral de La Laguna y de los imponentes dragos que coronan su plaza. El museo abrió sus puertas el 23 de diciembre de 2021, tras la exitosa restauración llevada a cabo por el prestigioso arquitecto Miguel Márquez Zárate.
La colección permanente del centro se despliega en una sucesión de estancias y habitaciones habilitadas y convertidas en salas de exposiciones en las que se exhiben obras de primeras espadas del arte canario, reunidas por la coleccionista Luz Marina Lorenzo. Entre los autores de la colección queremos poner el acento sobre varios óleos del DOMÍNGUEZ de finales de la década de los años cuarenta del pasado siglo, seleccionadas por Eliseo G. Izquierdo -quien forma parte, además, del Comité de Expertos de la Asociación en Defensa de Óscar Domínguez- para la actual propuesta de colección permanente. Dos Costureras (1949-1950) de la época esquemática del pintor, muy buenos ejemplos de la técnica y estilo de «triple trazo» que DOMÍNGUEZ desarrolla en esos años al servicio de una imaginación desprovista de la gravedad y la trascendencia de época anteriores. Pinturas cargadas de optimismo y vivacidad, pinturas desnudas como árboles en otoño, alumbradas por una gracia intrascendente que hace del juego su principal aliado. En palabra del propio autor, lo que alienta estas obras esquemáticas es «la forma y el color, la línea y la materia», dejando el tema de la composición en un plano secundario. Con todo, el motivo de «las costureras» es un elogio al trabajo, a la esperanza en la construcción de un mundo nuevo en el que el esfuerzo colectivo se encuentra en el centro de toda reflexión.